“Cuando una mujer dice no, es no”
Ni mujeres atemorizadas ni varones atrapados en su mandato machista. Una y otra vez, en la marcha de ayer se repitió y se gritó: “cuando una mujer dice no, es no”.
El discurso leído en la calle Villegas cortada comenzó con la cifra que nos interpela a todes: en lo que va del año ingresaron al sistema judicial 804 casos por violencia de género. Se pidió que la violencia sexual deje de ser una experiencia común y afirmaron que no hay sólo un tipo de persona que viola, como tampoco un solo tipo de persona que es violada.
Durante el acto se le pidió al gobierno municipal de Trenque Lauquen llevar a cabo un programa de educación y sensibilización ciudadana en el que se promuevan los derechos y libertades individuales, de todo ser humano. Que se convoque a la Mesa Local de Violencia, de forma urgente. Que se capacite a los tres poderes distritales en la temática de género (Ley Micaela), como así también a las instituciones (Salud, Justicia, Comisaría de la Mujer, Educación) y a los medios de comunicación que NO deben difundir los casos de violencia de género como hechos policiales que terminan por revictimizar a la mujer. Y por último, implementar la ordenanza contra el acoso sexual en espacios públicos que ha sido aprobada en el corriente año y aún no ha sido implementada.
Aquí, se transcribe el discurso leído ayer por integrantes de las tres organizaciones convocantes:
“Vivimos en un mundo donde la violencia sexual es una experiencia común, especialmente para las mujeres y los/as niños/as.Trenque Lauquen no es la excepción a esta realidad. Según puso conocerse en lo que va del año ingresaron al sistema judicial 804 casos por violencia.
Somos nosotras las mujeres a quienes nos educan que debemos prevenir la violación, “no te vistas así”, “no tomés alcohol”, “volvé temprano”, “no vuelvas sola” y cuidarnos durante toda nuestra vida. Y ante los hechos, siempre se culpa a la mujer. No es cierto que existe un “solo un tipo de persona que viola y sólo un tipo de persona que es violada”. El que viola no es un enfermo, sabe lo que hace, y puede, perfectamente, controlar sus impulsos sexuales. No se debe excusar la violencia, bajo ningún punto de vista”.
Estamos en un sistema patriarcal que tiene como fundamento la cosificación sexual, tanto de la mujer como de aquellos varones que no se adaptan a lo instituido.
Es precisamente desde la sociedad y sus instituciones desde donde debemos enseñar a no violar y a la importancia del consentimiento.
Hay que enseñar que NO es NO, y seguirá siendo NO.No tenemos la función de satisfacer los deseos del otro, no somos ninguna presa que cazar, ni ningún terreno que conquistar.
Por consiguiente, solicitamos de forma inapelable al estado municipal:
Llevar a cabo un programa de educación y sensibilización ciudadana en el que se promuevan los derechos y libertades individuales, de todo ser humano.
Que el Ejecutivo convoque a la Mesa Local de Violencia, de forma urgente.
3. Se capacitea los tres poderes distritales en la temática de género (Ley Micaela), como así también a las instituciones (Salud, Justicia, Comisaría de la Mujer, Educación) y a los medios de comunicación que NO deben difundir los casos de violencia de género como hechos policiales que terminan por revictimizar a la mujer. Efectivizar la implementación de la ley de Educación Sexual Integral que aborda los derechos de las personas, el cuidado del cuerpo y la salud, la perspectiva de género, el respeto por la diversidad y la afectividad.
Implementar la ordenanza contra el acoso sexual en espacios públicos que ha sido aprobada en el corriente año y aún no ha sido implementada.
Además de los reclamos anteriores venimos a esta plaza a decir que no queremos mujeres atemorizadas, ni varones atrapados en su mandato machista. Queremos poder desarrollar libremente nuestra personalidad y nuestras relaciones igualitarias con los/as demás, y eso incluye una sexualidad respetuosa, placentera y diversa, pero entre iguales.
Cuando una mujer dice NO, ES NO”.
Tras la lectura del documento, se realizó una marcha por la avenida Villegas hasta la Estación del Ferrocarril, que culminó en la Plaza San Martín, donde se compartieron reflexiones de las personas presentes, en un espacio que fue aprovechado para reclamar con energía que “el pueblo deje de mirar para otro lado” y que las instituciones “se hagan cargo de lo que está pasando”. Se pidió que la urgente “implementación de la ley de Educación Sexual Integral” en las escuelas donde se incumple la ley y hubo lugar para repudiar el golpe de estado en Bolivia y la violencia estatal que castiga a la población chilena.