A 42 años de un triple secuestro y desaparición forzada

El sábado 15 de junio se cumplen cuarenta y dos años del secuestro y desaparición forzada de tres jóvenes nacidos en Trenque Lauquen. Héctor Oscar Manazzi, Ricardo Antonio Sangla y Rodolfo Emilio Pettiná estaban radicados en la ciudad de La Plata, más precisamente en el Centro Universita-rio de Trenque Lauquen, en la calle 41, porque estudiaban Medicina, a la vez que formaban parte del Centro de Estudiantes de la Facultad. ¿Habrá sido ésa la razón del secuestro de los tres, como suponemos ante la falta de cualquier evidencia?
Según otros estudiantes de nuestra ciudad que fueron testigos de la brutal irrupción del grupo de tareas genocidas, en plena madrugada, Rodolfo (23 años), les rogó a los asesinos: “¡Llévenme a mí, dejen a los pibes!”, en alusión a Ricardo y Héctor, que tenían tan sólo 19 años. De más está decir que el pedido desesperado fue ignorado…
Durante cuarenta y un años, cada 15 de junio el reclamo de Verdad y Justicia tuvo una referencia ineludible: Elena Taybo, la mamá de Rodolfo, protagonizó innumerables actividades con el objetivo de saber qué había pasado con los tres estudiantes de Medicina. Si bien nunca pudo avanzar con un dato cierto, como algún testimonio de un sobreviviente que los hubiera visto en tal o cual centro clandestino de tortura y exterminio, Elena jamás perdió la esperanza de reencontrarse con su hijo (con “sus huesitos, aunque más no sea” decía en los últimos años).
En este cuadragésimo segundo aniversario del triple secuestro, resulta impactante pensar que Elena no estará rememorando en su casa el significado de una fecha que marcó su vida y la de toda su familia. Sin embargo, la lucha de Elena será resguardada por sus hijos, nietxs y bisnietxs, que han podido admirar desde muy cerca la entereza de una mujer extraordinaria, y aprender de ella el valor de alzar la voz ante las injusticias.
Cabe en esta fecha saludar también con el más cálido abrazo a Mery Luisa, la mamá de Ricardo Sangla, que junto con su compañero de toda una vida, Don Ricardo Sangla, protagonizó muchas de las Marchas que se llevaron a cabo en Trenque Lauquen pidiendo por su hijo y los 30.000. Mery, junto con sus hijas y nietxs, sigue portando el reclamo que ha hecho de nuestro país un referente internacional en materia de derechos humanos.
Lxs hermanxs y sobrinxs de Héctor Manazzi han sido otros protagonistas en las movilizaciones por Memoria, Verdad y Justicia. A ellxs les corresponde también conocer qué pasó con su hermano y tío, qué fue de su destino luego de aquella noche aciaga en el C.U.T.L.
A cuarenta y dos años de una madrugada de horror, los rostros siempre jóvenes de Rodolfo, Ricardo y Héctor nos preguntan qué seremos capaces de hacer para que sus historias de vidas solidarias no sean olvidadas.